_edited.webp)
Historia
El Botel Albatros, inaugurado en 1969, fue el primer hotel flotante de Praga, creado como respuesta a la escasez de alojamientos durante la época de apertura política de los años 60.
La idea fue propuesta por el diseñador de hoteles Zdeněk Davídek como una solución rápida e innovadora para atraer a turistas, políticos y viajeros de negocios.
Formaba parte de un plan más amplio para construir tres grandes hoteles flotantes, cada uno con capacidad para 180 huéspedes, junto con el Admiral (1970) y el Racek (1971).
Construido en los astilleros de Libeň, el Albatros tuvo que ser transportado por partes debido a la baja altura de los puentes de Praga, y fue ensamblado en el lugar, cerca del muelle de Ludvík Svoboda.
Las etapas finales incluyeron aislamiento, cableado e instalaciones interiores, convirtiéndolo en un hotel flotante completamente funcional.
Su ubicación única, entre el Puente Štefánikův y la Isla Štvanice, lo convirtió en un punto de encuentro para la élite de la ciudad, acogiendo exclusivas discotecas para la “juventud dorada” de Praga.
Con el tiempo, el Albatros se consolidó como un ícono del paisaje fluvial de Praga, simbolizando la creatividad y capacidad de adaptación de la ciudad durante una época de cambio político y social.
Hoy en día, sigue siendo un símbolo memorable de aquella era innovadora en la historia de Praga.
Hoy en día
El Botel Albatros conserva todavía su diseño clásico con aire titánico, un estilo que hoy casi ha desaparecido en Europa.
Su temática náutica vintage —con acabados en madera, iluminación cálida y mobiliario de cuero— crea una atmósfera única y nostálgica.
A diferencia de los hoteles tradicionales, el Botel Albatros ofrece auténticas cabinas estilo barco en lugar de habitaciones estándar, lo que brinda un espacio acogedor e íntimo que captura el verdadero espíritu de la vida en el agua.
El espacio limitado realza el carácter exclusivo de la estancia, convirtiéndola en una experiencia flotante extraordinaria, justo en el corazón de Praga.
Fiel a su encanto retro, el Botel Albatros te invita a viajar en el tiempo y crear recuerdos inolvidables en una de las ciudades más encantadoras de Europa.
